
Las lavadoras podrán tener inteligencia artificial, lavado y secado en el mismo cuerpo, así como secados rápidos o ahorro de energía, pero todavía están lejos de ser perfectas debido a los sonidos, bugs y hasta las fugas que se producen por el uso cotidiano y que aún estamos lejos de poder resolver.
Dentro de este contexto, una de las dudas más grandes en cuanto a los ciclos de lavado es los "golpes" que a veces vienen de dentro de la lavadora. Uno de los más famosos es el que ocurre justo después de que la tina se llena y que parecen crujidos potentes pero cortos. A este sonido se le conoce como golpe de ariete y es más común de lo que parece.
Qué es el golpe de ariete y por qué se produce
Estás llenando el tambor de la lavadora y al acabar notas un sonido de explosión, como si algo se rompiera de la nada. Te espantas, pero luego de unos segundos la lavadora sigue su ciclo de manera normal; lo dejas pasar. Si no sabes qué lo ocasiona, lo más importante es conocer que a esto se le conoce como golpe de ariete.
Este golpe se produce por un aumento brusco en la presión en una tubería causado por una variación rápida de la velocidad de caudal. Es decir, el fenómeno se produce cuando fuerzas a un líquido, que circula en un sistema cerrado, a detenerse bruscamente o cambiar su dirección, como cuando la lavadora está en su límite y cierra sus compuertas. El choque se extiende por todo el sistema y se multiplica en un primer momento, causando un aumento en la presión.
Es importante mencionar que el golpe de ariete no solo se produce en agua, sino también en otros líquidos incompresibles y gases. También debes considerar que el choque de presión conlleva, a menudo, vibraciones o un ruido de golpeteo que se va repitiendo antes de que descienda la presión. Es por esto que, a veces, también se habla de un ariete hidráulico. Aunque los choques de presión se pueden oír, son difíciles de medir, ya que el choque de presión se establece y disminuye en un tiempo extremadamente corto.

Como ya dijimos, las causas son la apertura y cierre rápido de válvulas, el arranque o la desconexión rápida de bombas, pero también se debe a la desconexión de la columna de agua o amortiguación de la presión que provocan este efecto negativo. Otro punto a destacar son los sistemas diseñados de manera que se interrumpe el flujo continuo y también conllevan un mayor riesgo. Por este motivo, en la medida de lo posible, se deberían evitar codos y fuertes variaciones de presión.
Cuáles son las soluciones a este problema
Antes de pensar en soluciones, debes saber que la razón por la cual deberías arreglar este problema, principalmente, es porque podría ocasionar fugas, deformación o destrucción de las válvulas, rotura de vástagos de la bomba, rotura de rodetes o fugas en tuberías. Por ello, lo ideal será:
Revisar que no existan tuberías o conexiones sueltas para reducir el efecto del golpe de ariete.
Instalar tu drenaje con cámaras de aire, es decir, estas tuberías verticales instaladas cerca de las válvulas de agua que sirven como amortiguadores de los golpes de presión que provocan el golpe de ariete. Aunque debes darle constante mantenimiento.
Abre y ajusta la presión de agua al lavar, ya que si no tienes toda la presión, el golpe de ariete tendrá un efecto mínimo.
Dale mantenimiento a las tuberías.
Instala supresores de golpes de ariete, que absorban las ondas de choque.
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